viernes, 23 de noviembre de 2007

La Mensajera

Eran días en los que el cielo estaba triste, y mis sentimientos, aun sin respuesta y sin ninguna explicación divagaban entre aquel cielo gris y esos ojos claros, brillantes, en verdad que era un tiempo amenazador, un paisaje donde poco se podía describir, salvo el sonido de las gotas que caían sin cesar y golpeaban el suelo como queriendo decirme que todo era inevitable y que de todas formas tendría que suceder.

Mientras busco en el camino, observo como todos los senderos me llevan hacia esos ojos claros, miro hacia el cielo y una extraña nube me acompaña, converso con ella acerca de ellos, contándole al detalle cada una de las cosas que pasan por mi cabeza.

Así, cuando volví a ver ese cielo, pude notar un claro, y pude hablar con las estrellas, les pedí guiaran mi camino, y así lo hicieron, algunos pasos más allá, en medio del camino oscuro, una hermosa rosa me pidió la llevara, y aunque me creí loco en aquel instante, accedí con agrado, mientras tanto, me seguía preguntando, tratando de obtener respuestas, tratando de aclarar el embrollo en el que se encontraba mi cabeza y mi corazón.

Después de mucho caminar, me senté al lado de una roca a descansar, protegido por las ramas de un frondoso árbol ymientras la lluvia no cesaba y el día se tornaba más gris; mientras pasaba el tiempo seguía pensando, ¿qué debería hacer con todo esto?, hasta que aquella roca me habló, y me dijo: - “esa rosa, te servirá como mensajera, dile todo lo que quieras decir a esos ojos claros, pues ella sin palabras, podrá dar a expresar lo que sientes” –

Así lo hice, y fui en busca de esos ojos claros, brillantes, aunque el tiempo fuera malo, aquella nube me acompañó, mantuvo una pequeña parte de ese cielo gris despejada, para que pudiera ver a aquellas estrellas que guiaban mis pasos, y protegí aquella rosa, tan frágil, tan tierna, no pensé en otra cosa más que en encontrarlos, mientras mis sueños iban creando un ambiente totalmente diferente.

Al encontrarlos, no supe que decir, las palabras, se quedaron en silencio, y mientras ellos miraban fijamente ese cielo gris, le entregue la rosa, sonreí y sin saber que ocurriría después, me marche…

jueves, 22 de noviembre de 2007

El Espíritu del Bosque

«Soy la magia, soy la luz
un instante de eternidad
la puerta abierta al más allá
si duermes me verás

Si has llegado hasta aquí
cuídate de morir sin antes dejar
terminados todos tus sueños
la vida es para luchar»

Ahora te toca vivir
ya habrá tiempo de morir
hazte amigo de la adversidad
o nunca serás feliz

Y algún día verás
que la vida es muy corta para llorar
se tú mismo, eso nunca nadie
te lo podrá quitar
 
Letra (Txus Di Fellatio)

martes, 20 de noviembre de 2007

Y asi te conocí

Aun recuerdo tu pelo agitado por el viento y tus ojos fijos en el pavimento, como esperando no ser vista en aquel momento, pasando desapercibida, pensando ¿quién sabe en qué?

Pase por tu lado y ni cuenta te diste, trate de seguirte algunos pasos y mientras lo hacía, no pensé en enamorarme de ti, curiosa manera de hacerlo ¿verdad?, en eso volteaste y pude ver tus ojos, quede prendido de ellos por algunos segundos, y el miedo idiota y la vergüenza de aquella escena, aunque no te dieras cuenta, hicieron que rectifique el paso y siga mi camino.

Días después te volví a encontrar, y mis ganas de conocerte aumentaron esta vez, y tras algunas semanas de verte siempre pasar, decidí dejar mis sueños atrás, decidí hacer las cosas de la manera menos pensada, deje volar mi imaginación y deje que algunas líneas te dijeran que es lo que pensaba y sentía en aquel instante, quizás en aquel momento sólo eran palabras tiradas al viento, para ver si podrías escucharlas en algún momento.

Las semanas fueron pasando una a una, y me aleje un poco de aquella ilusión, no volví a ver tus ojos durante algún tiempo, y aunque siempre soñaba con ellos, no pensé las cosas resultarán así.

Se acercaba navidad, y por casualidad o destino te volví a encontrar, sabía que no volvería a verte durante un buen tiempo, y así envié mi segunda carta, donde pude decirte cuanto me gustabas y quería conocerte, y aunque trate de explicar todo aquello que sentía, no tuve el valor de decírtelo cara a cara.

Son cosas de la vida, donde el tiempo es una ilusión y mis sueños se convierten en realidad, al fin te pude hallar, vi esa luz que empezó a guiar mi camino, y se convirtió en mujer, se convirtió en ti, y me sentí feliz de tenerte más cerca, de encontrar todos y cada uno de mis sueños en tus ojos.


La Segunda Carta a un Cielo Gris

Ya han transcurrido muchos días desde que te vi por primera vez, otros tantos desde que me di cuenta, que estoy enamorado de ellos. Hoy al despertar me pregunte, si, ¿querer es extrañarlos a cada instante? Pues cada minuto que pasa los recuerdo más, en otras palabras, viven en mi pensamiento.

A veces creo que todos mis intentos se volverán nulos, el tiempo y la distancia, no son mis mejores amigos, están tan lejos y lo sé, hoy soy nada en su todo, soy un susurro en este silencio…

Ahora si me siento un poco tonto diciendo tanta cosa loca al cielo…No lo sé… mientras espero puedan escuchar mis deseos en el viento, me gustaría saber que piensan, me pregunto si debo seguir haciéndolo… porque hasta hoy, lo más difícil que he tenido que pasar, es haber encontrado estos ojos claros, que significan todo aquello que busco: la ternura, la sencillez y esa alegría tan particular que convierte mi día oscuro, en el más radiante de todos y no poder decírselo de frente. Para mi esos ojos claros lo son todo…

Si no lo digo ahora, no es por miedo, sino porque creo no es el momento, ni la forma… están tan lejos, que hoy prefiero ser dueño de silencio, que esclavo de mis palabras.

Historias

Escribo una nueva historia, que va transformando mi vida en una ilusión, disfrutando todos los silencios, y escribiendo quizás cosas sin sentido, escribiendo y tratando de despertar en mí el lenguaje simple de aquella compañía.

Hoy esos ojos claros se han convertido en la razón de esta nueva historia, donde trato de olvidar mis derrotas y conflictos, mientras desafío a mis miedos y esta tonta indecisión de no saber que hacer... es como si le diera valor a todo aquello que pensé no tenía sentido.

Es tratar de aceptar que muero, cuando no están a mi lado, es tratar de disfrutar cada silencio, como en una canción, y aunque es difícil tratar de mentirle al corazón, es tan difícil hacerle fingir que no estoy loco por ti.

¿Te dije?

¿te dije alguna vez que me gustan tus ojos,
tu sonrisa y ese cuerpo que me fascina?
De seguro lo plasmé en un papel,
tal vez sólo lo soñé...
Y pienso tanto en ti,
que mientras observo como lees esta líneas,
me pregunto si debo seguir haciéndolo,
La verdad tengo miedo de enamorarme
un poquito más.
Quizás sorias, pero en verdad no se que ahcer,
esto que llevo dentro, a veces me confunde,
otras me vuelve un poco loco...
Pero ¿quá se puede hacer con el amor,
si es cosa de el?

La Primera Carta a un Cielo Gris

De seguro te preguntarás por el origen de esta carta, pués creo es mejor ovidarse de ello, y prestar atención a lo interesante de este momento.

Hace poco los vi por primera vez, y no se cómo sucedió, pero me cautivaron en aquel instante, para ser sincero, he pensado mucho en ellos, tanto que aveces dejo de pensar en mi, creo volverme un poco loco, no lo sé...

No puedo decir, que me atrae de ellos, ¿Será la ternura de su mirar?, ¿quizás su forma de estar?, ¿o esta inmensa tristeza que me da cuando se van?.

Creo que esos ojos claros, son todo aquello con lo que se puede soñar, y mientras pasa el tiempo más me enamoro, me enamoro de este sueño, de esta tonta ilusión, de este simple gusto por sentirme vivo, pero se que mentiría si digo que no siento nada, mentiría si los observo y digo que no pienso en ellos...

De seguro los viste alguna vez, y compartieron llantos y alegrias en algún momento, son preciosos, y provocan en mi una sonrisa mágica, ¿los viste?, de seguro que si, pues esos ojos son brillantes, y aunque aun no encuentro la mejor manera de decir lo que pienso y siento, esto me sigue pareciendo una locura.

Y aunque se no harás nada al respecto, solo quería que lo supieses, como me gustan esos ojos claros. Espero el tiempo sea bueno conmigo, y dejes en el viento, esta hsitoria que comparto ahora, que aunque prefiere mantenerse en el anonimato, va haciendo nacer un pequeño rayo de luz en medio de este cielo gris.

Un día mas sin tí

Hoy desperté antes que la mañana, quizás cansado de pensar, la noche paso y tras compartirla con la soledad, mire la luz por la ventana y me dije: “Un día más sin ti, no es un día más para vivir”

Todo es distinto contigo, así que desperté un poco antes que el sol, y tras una noche vacía y en soledad, buscándote en mis sueños me dije: “Un día más si ti, es un día más sin vivir”

Donde encuentro lo tuyo, lo que no esta en mi. Donde puedo encontrarte en mi, si cierro los ojos y el silencio se marcha con tu mirada y la mía abrazadas, no lo sé.

Ahora que estamos al inicio de esta corta historia, y con todo el dolor que al despertar mi soledad y yo sentimos, después de hablar supimos la verdad: que “Un día más sin ti, no es un día más para vivir”